Los nuevos veterinarios se proyectan a un futuro incierto

La carrera de Veterinaria de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) cerró sus puertas a todos los que quisieran ingresar en el 2018. Para los que ingresaron en el 2017, el título que recibirán una vez terminada su trayectoria académica, no tendrá validez en cuanto pongan un pie fuera de la provincia.

La decisión de no admitir más ingresantes fue tomada por el Consejo Directivo de la FAZ, la facultad que agrupa las carreras de veterinaria, agronomía y zootecnia, luego de dos inspecciones que realizo la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau).

Según explicó Marcos Anan Robinet, estudiante de la carrera de veterinaria, “anteriormente en el concejo veterinaria no tenía ningún tipo de representación, a pesar de que el 45% de los alumnos de la faz son de esa carrera”.

“El problema comenzó luego de una inspección de la Coneau (Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria) en el 2013, en la que exigían modificaciones a la carrera que debían realizarse hasta el 2016. Pero rectoría nunca cumplió”, explicó Anan Robinet, candidato a consejero del movimiento independiente de veterinaria, agronomía y zootecnia (Mivaz) – agrupación de docentes y estudiantes para lograr mayor participación en la votación de proyectos y en las decisiones que se toman desde el consejo- .

Entre los requisitos para la nueva acreditación, el estudiante menciona que ciertas materias debían ser dictadas por veterinarios pero eran encabezadas por  ingenieros zootecnistas; pedían mayor actividad en internados de grandes animales y también resolver algunas fallas en el funcionamiento de una sala de necropsia.

En una nueva inspección de la Coneau en 2016, la comisión otorgó un año más a la facultad para hacer las modificaciones correspondientes. Al año siguiente, el organismo quitó las acreditaciones nacionales a veterinaria, lo que significa que los estudiantes que ingresaron en el 2017, una vez recibidos no podrán ejercer fuera de la provincia porque su título no es válido a nivel nacional.

“Nosotros entendemos que las decisiones se tomaron mal, y eso llevó a que la carrera esté desacreditada. Por eso se creó la agrupación en noviembre del año pasado”, manifestó Anan Robinet. El proyecto de Mivaz fue aprobado por rectoría el miércoles 18 de este mes.

Marcos aseguró que los objetivos inmediatos de la agrupación son “incluir a los estudiantes que ingresaron en el 2017 en el plan de los años anteriores y lograr que su título sea válido en todo el país; y luchar contra el cierre definitivo de la carrera”, que sería, como él dijo, el peor de los casos.

Por último, a pesar de que Anan Robinet se mostró esperanzado con la aprobación de la agrupación, afirmó que no considera posible que el problema se solucione en menos de un año, y por ende en el 2019 tampoco se podrán inscribir nuevos alumnos que quieran estudiar veterinaria.

Por: Valentina Sadir Curia

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