Anastasia Barbo, una actriz entre las aulas: “Hoy lo que más me gusta es el poder transmitirle cosas al público”

Anastasia María Barboza, como se la conoce en la facultad (UNSTA) o “Anastasia Barbo”
como la llaman arriba de las tablas, es una estudiante tucumana de la carrera de Locución
Nacional de 20 años que supo combinar la locución con el teatro y que tiene muchas
condiciones para llegar muy alto.

– ¿Hace cuánto haces Teatro?
– A: Hago teatro hace 14 años, desde que tengo 6.
– ¿Cómo surgió tu deseo por actuar?
– A: Desde chiquita mi abuela comenzó a llevarme al teatro y un día fuimos a ver una comedia
musical "Sueños de Hadas"; cuando salí estaba tan impresionada y emocionada que lo primero
que dije fue “yo quiero hacer eso”. Así es que esa semana mis padres me inscribieron en la
Academia que producía la misma obra.
– ¿Qué es lo que más te gusta del Teatro?
– A: Hoy lo que más me gusta es el poder transmitirle cosas al público, sentir que salen llenos y
que eso me llene también a mí.
– ¿Cuál es tu mayor referente?
– A: Bueno, tengo varios. A nivel local tengo dos grandes maestras y guías que son Jackie
Anastasio Salas, con quien actualmente trabajo, y Manina Aguirre.  Son dos actrices muy
buenas de nuestra provincia.

De Jackie estoy aprendiendo muchísimo en este tiempo, me tiene mucha paciencia y eso
significa mucho y con Manina tuve oportunidad de trabajar de más chica y en ese momento
aprendí un montón de cosas de ella. Ahora disfruto mucho de ir a ver todas sus obras porque
realmente es un placer verla actuar, se nota que ama lo que hace.
Después sigo a otros artistas a nivel nacional porque me encantan sus producciones, sus obras
o en algunos casos películas. Soy gran  admiradora de Pepe Cibrian. Me enamoré del musical
Drácula y luego de él cómo actor cuando lo vi en "El hombre de la mancha" y en "Marica",
ambas muy buenas. Pero además, me encanta escucharlo hablar.
También soy seguidora del trabajo de Meryl Streep, Helena Bonham Carter y Anne Hathaway.
– ¿En qué obras participaste?
– A: Comencé en "Sueños de Hadas", después "Ilusiones mágicas " con la productora Hadas
Cantantes. Estuve en "Habrá una vez…" del grupo independiente Vuelo en V. Intérprete "La
casa de Bernarda Alba" en un taller del colegio. Recientemente partícipe en "Gaviotas" y
"Mujeres con aroma de café concert" con el grupo Atrapasueños.

– ¿Cómo te preparas para salir a escena?
– A: Antes de salir, ese mismo día la verdad no siento nervios, pero si ansiedad. Generalmente
no puedo comer nada, tres horas antes más o menos. Me gusta estar en silencio, buscar la
calma, en lo posible que no me hablen mucho. Pero tampoco soy tan jodida con eso.

Ya sobre la hora, suelo estirar, vocalizar y por ahí cantar un poco alguna canción que me
guste y lo último es dejar a Anastasia en un costadito y dejarle lugar al personaje.
– ¿Cuál fue el personaje que más te gustó interpretar?
– A: Disfruté mucho de todos los personajes,  pero interpretar a Bernarda [“La Casa de
Bernarda Alba”], aunque no fuera más que una función para el colegio, fue un desafío y me
sentí muy conforme con el resultado.
Por otro lado, ahora estoy encantada con Adrianna, mi personaje en Mujeres con aroma de
café concert. Es una chica muy distinta a mí, pero con algunas chispas de lo que soy cuando me
siento libre. Me gusta poder jugar con ella, divertirme. Y también es un desafío porque es la
primera vez que incursiono en la comedia, un terreno bastante temido para los actores.
– ¿Participaste en algún Casting fuera de la provincia?
– A: El año pasado tuve la oportunidad de ser convocada al casting que hizo José María Muscari
para "Bollywood". Fue una experiencia única.  El casting más grande al que fui. Digo grande no
por la jerarquía del director, o porque fuera en Buenos Aires, sino por la cantidad de gente que
fue convocada. Éramos un montón, pasábamos de a turnos y en medio de las instancias y con
la constante ansiedad, no nos faltó ocasión de poder conversar entre los que estábamos y
compartir experiencias anteriores, anécdotas y demás.  Fue un día muy intenso. A pesar de no
quedar seleccionada, siento que  aprendí muchísimo de esa experiencia y que crecí también
después de ese día.
– ¿Encontrás alguna similitud entre el mundo del teatro y la locución?
– A: Considero que el teatro, la actuación y la locución están completamente relacionados.
Para mí un actor tiene que hacer talleres de locución, obviamente no vamos a exigir que
también cursen la carrera, pero sí un mínimo. Porque además de tener talento, ser bueno y
llegar al público, el “plus” de una buena pronunciación, que se te escuche claramente, aporta
cierta armonía al resultado que permite que el espectador disfrute más del producto.
A su vez, el locutor tiene que tener un poco alma de actor. En la carrera muchas materias están
ligadas a la expresión corporal, la improvisación, la actuación, la interpretación, el manejo de
las emociones, etc. Y si uno no apela al lado actoral llegar a algunos de esos puntos se hace un
poco más complicado.
En definitiva están conectadas por varios puntos, me atrevo a decir que se alimentan, se
complementan.
¿Cómo te organizas entre el teatro y la facultad?
– A: Bueno, la cuestión del tiempo es la más compleja. Honestamente hago malabares  y
siempre me faltan horas en el día y energía en el cuerpo. Pero siempre digo: "un esfuerzo más”
y le pongo lo mejor de mí a las dos cosas. Obviamente siempre tengo que adaptar los horarios
de ensayo a los de la facultad, que ya son bastante ajustados. Sumando a esto el resto del
elenco también tienen sus horarios que hay que manejar. A veces toca ceder unas horitas que
eran de descanso,  pero es parte de lo que elegimos hacer. Cuando estas ensayando la verdad
te olvidas del mundo, del sueño, del hambre, de todo. Es complicado, pero se puede hacer las
dos cosas y bien.
Por: Eliana Gabriela Guchea.

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