La pasión pintada de “Naranja”

La “celeste y blanca” no es la única camiseta que se lleva con orgullo. En el hockey tucumano,
“La Naranja” también se luce: por ella se disfruta, por ella se sufre, por ella “se deja la vida”.
Jugadores y jugadoras se pusieron la camiseta de Tucumán para representar a nuestra
provincia en el Campeonato Argentino de Selecciones Mayores que se jugó en Buenos Aires
durante el pasado fin de semana, del jueves 10 al domingo 13. Y como era de esperarse, la
“Garra tucumana” se hizo notar en la capital del país, para seguir haciendo historia.
Es cierto que hombres y mujeres corrieron con distinta suerte: Los Naranjas quedaron en el
sexto puesto y conservaron la categoría luego de tres derrotas en la Zona A (junto a Buenos
Aires, Litoral y Entre Ríos). La rama femenina, en cambio, se consagró subcampeona al caer en
la final contra Buenos Aires por 2-0.


Las Naranjas, con Camila Machin como capitana del seleccionado tucumano, consiguieron el
pase a la final del torneo, algo que no lograban hace 17 años. Tucumán estuvo en la Zona B
con Santa Fe, Mendoza y San Juan. En su primer encuentro, se enfrentó a las santafecinas y
empató 0 a 0 (el partido iba a jugarse el jueves pero por la lluvia se trasladó al viernes). El
siguiente rival, Mendoza, no generó complicaciones pero las naranjas tampoco pudieron abrir
el marcador y el encuentro finalizó 0-0. Recién en el tercer partido, contra San Juan, se hizo
sentir el grito de gol tucumano, la contienda terminó 4-0 con goles de Sofía Curia (x2), Camila
Machin y Guadalupe Gallardo. Así, las tucumanas consiguieron el primer puesto en la Zona B, y
las semifinales eran un hecho. Luego de un 0-0 en tiempo regular contra Bahía Blanca, Las
Naranjas tomaron impulso en el “shoot out” (6-5) y se adueñaron del pase a la final, etapa en
la que se encontró con las locales que habían dejado afuera a Santa Fe.


El partido por el título, histórico para este equipo que volvió a ubicar a Tucumán en una final
de este torneo, no iba a ser fácil. Del otro lado estaba el último campeón, que miraba con
hambre de gloria un nuevo título, en busca del pentacampeonato.
La arquera de Las Naranjas, Paulina Carrizo –elegida mejor arquera del torneo-, se vistió de
heroína al arranque del tercer cuarto, tapándole un penal a Geraldine Fresco Pisani, gol que
habría abierto el marcador. “Lo único y realmente importante, era mirar la pelota. Y no
tentarme en moverme antes de tiempo”, contó Carrizo en exclusivo para esta entrevista.


Pero Buenos Aires, con un 11 inicial integrado por 8 jugadoras de Las Leonas, encontró
finalmente los goles que le permitieron consagrarse campeón en los palos de Agustina Habif y
María José Granatto –actual mejor jugadora sub 23 del mundo. El gol de Habif provocó
minutos de incertidumbre durante el partido, mientras los árbitros analizaban si era válido
porque la pelota no habría tocado la tabla dentro de los tres palos (el gol llegó de un córner
corto: al ser el primer tiro directo al arco (el de Habif), la bocha debe ir a la altura de la tabla).
El gol fue convalidado y acabó con la igualdad a 10’ para el final. Cinco minutos después llegó
el gol de Granatto, luego de que Delfina Merino, la capitana de las Leonas, intentara de revés.
Eso no fue motivo para que las tucumanas dieran por terminado el partido, al contrario,
encontrarían su fuerte en la defensa y buscarían el descuento pero éste no pudo llegar. “Dimos
todo y tratamos de dejar lo mejor que se pueda a la provincia. Esperamos haber transmitido la
pasión y garra con la que jugamos los partidos”, le reconoció Tania Cruz, volante externo de las
naranjas, a “Me Veo”. Y agregó: “Fuimos de menor a mayor pero siempre teniendo claros los
objetivos. Siento orgullo de compartir la cancha con estas bestias de jugadoras que tiene el
hockey de Tucumán”.
Luego de un destacado torneo, con notables actuaciones dentro del plantel Naranja, las
jugadoras regresaron a la provincia con un subcampeonato que mejora el tercer puesto
obtenido en las dos últimas ediciones (Tucumán 2016 y Salta 2017). En ese mismo sentido, la
presencia de Victoria Sauze y Machin dentro del plantel de Las Leonas, que viajará a fin de mes
a Cochabamba (Bolivia) para los Juegos Suramericanos, da nuevas esperanzas. El torneo
parece ser un guiño al trabajo del equipo tucumano, que avanza hacia lo más alto del hockey
argentino. “Muchísima gente de Tucumán nos mando mensajes. Las redes sociales y el hecho

de que se haya transmitido en vivo, fue increíble y muy positivo para el hockey tucumano”,
opina al respecto la guardiana del arco Naranja. Su compañera, Tania Cruz, comparte la idea:
“Agradecer a todas las personas que nos hicieron el aguante. Eso nos llegó”.
Ambos equipos, Tucumán y Buenos Aires, pusieron todo, nada faltó: un poco de nerviosismo,
mezclado con mucha pasión, dio como resultado una atractiva final. ¿El condimento especial?
Una combinación de compañerismo y respeto: las tucumanas formaron un túnel para dar paso
a las recientes campeonas; las bonaerenses devolvieron el gesto hacia Las Naranjas. La medalla
dorada quedó en manos del buen ejemplo.
El plantel subcampeón: Paulina Carrizo, Guadalupe Gallardo, Emidia Núñez López, Tania Cruz,
Sofía Darnay Ivana Rodríguez, Noel Rojas, Carla Moyano, Camila Machin, Florencia Klimbovsky,
Valentina Garretón, Solana Olmedo, Guadalupe Novillo, Ana Gray, Carolina Lobo, Lucia Allier,
Agustina Barreiro, Karen Gordillo, Victoria Sauze, Sofía Curia, Rafael Darnay (DT), Federico
Álvarez (DT) y Sebastián Pece (PF).

Por: Agostina Navarro Aranda

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