Tras seis semanas de paro general en las universidades del país, volvieron a su ritmo habitual. Los alumnos comenzaron las clases universitarias nuevamente el 16 de septiembre, pero esto no es el fin. Se esperan nuevas medidas a realizar para llegar al mejor acuerdo posible en defensa de la educación pública, reclamos salariales y el futuro de los estudiantes.
Los docentes afiliados en la Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios línea Histórica (Conadu Histórica), decidieron levantar el paro aunque manteniendo los reclamos con otras medidas de fuerza. Así finalizan semanas consecutivas sin clases desde que comenzó la huelga, el 6 de agosto.
El secretario general de la UNT, José Hugo Saab, aseguró que la UNT buscará que los estudiantes puedan contrarrestar las semanas sin clases. La secretaria académica, Carolina Abdala, convocará a los secretarios académicos de las facultades y a los directores de las escuelas experimentales, por segunda vez, para empezar a hacer una planificación de la recuperación de clases perdidas.

Los alumnos también se hicieron escuchar
Estudiantes de distintas facultades no descansaron hasta hacer valer sus derechos como estudiantes con educación pública.
Toma de facultades, asambleas generales, huelgas rodeando casa de gobierno, fueron algunas de las manifestaciones efectuadas por los alumnos de la Universidad Nacional de Tucumán, quienes acompañados por padres y profesores no se dejaron intimidar y gritaron sus derechos a ser educados.
Pero no todo es luchas y gritos, argumentos fueron defendidos y peleados, y entre el mismo alumnado hubo diferencias a la hora de tomar una decisión sobre cómo actuar.
Rosario Terán Alurralde de 23 años de edad, alumna de Medicina Veterinaria en la Facultad de Agronomía y Zootecnia nos cuenta lo que piensa acerca del paro universitario y como no solo a ella sino a demás estudiantes afectó.
VIDEO.
Además de imposibilitar la rendición de finales y parciales, junto con los problemas salariales de los docentes, hubo recortes presupuestarios en varias de las facultades impidiendo a los alumnos realizar materias prácticas de utilización de artefactos tecnológicos así como diversas maquinarias y/o equipo específico.
Entre ellas la Facultad de Agronomía y Zootecnia han cerrado las inscripciones a medicina veterinaria y zootecnia para el año entrante por falta de presupuesto entre otras cuestiones monetarias.
La huelga por la educación pública concierne mucho más de lo que pensamos a los alumno y es momento de que se salga a la luz todos los inconvenientes que los jóvenes están viviendo en su formación profesional.
Por María Auad

